XI
El curandero que asombró a Bell Ville
Las calles de la ciudad se encontraban abarrotadas de gente en movimiento, en medio de un bullicio generalizado. Pocas eran las personas que habían decidido quedarse en sus casas y familias enteras se paseaban de punta a punta de la localidad, en medio de una algarabía que no tenía demasiados antecedentes en la frondosa vida de Fraile Muerto, San Jerónimo o Bell ... Continuar leyendo